El Poder del Eclipse lunar
Este artículo nace para acompañarte si últimamente sientes que las energías se intensifican y que el eclipse lunar te envuelve en una atmósfera abrumadora. Se trata de una invitación a explorar, desde una perspectiva que reconoce la interconexión de todo, cómo podemos entender y trabajar con estas vibraciones en nuestra vida.
El fenómeno del eclipse lunar ocurre durante una luna llena, cuando la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna, proyectando sombras que tiñen de rojizo a nuestro satélite. Desde el punto de vista astrológico, este evento nos empuja a adentrarnos en los impulsos inconscientes que emergen en momentos de vulnerabilidad emocional, haciendo que la adaptabilidad natural de nuestro ser se vea desafiada.
En este contexto, los nodos Norte y Sur se manifiestan como dos polos de un mismo proceso: la integración de energías del pasado y la liberación de aquello que ya no nos sirve. Mientras el Nodo Norte simboliza el camino evolutivo y el sentido de dirección que invita a expandir nuestra consciencia, el Nodo Sur representa hábitos y patrones heredados que, aunque no sean intrínsecamente negativos, pueden frenarnos si no los transformamos.
La posición del Sol en Piscis nos invita a reconectar con nuestra esencia más pura, a mirar más allá de la superficie y a escuchar la voz interior. Al mismo tiempo, la Luna llena en Virgo pone de manifiesto el aprendizaje necesario para ordenar y pulir nuestras experiencias, revelando las lecciones que se entrelazan en nuestro camino personal.
En este eclipse, la oposición de la Luna llena a Saturno resalta la importancia de encarnar la experiencia espiritual a través del cuerpo. Se trata de un llamado a transmutar limitaciones y a reconocer que somos, simultáneamente, espíritu y materia. Es un momento propicio para reflexionar sobre cómo participamos en sistemas de creencias y patrones de acción en nuestra sociedad, y para preguntarnos: ¿estamos permitiendo que el dolor y las viejas heridas nos impidan sentir plenamente? ¿Estamos abiertos a incorporar nuevas prácticas que nos ayuden a expandir nuestro sentir colectivo?
Otros aspectos clave invitan a la introspección y al autoconocimiento. La soberanía interior se forja a partir del aprendizaje emocional, y la verdadera autonomía se basa en un cuerpo que se muestra compasivo y resiliente frente a las transformaciones de la vida. Aprender a fluir con los cambios es esencial para crecer y vivir con autenticidad.
En este proceso, Mercurio retrógrado—regente del eclipse—nos recuerda que, muchas veces, no se trata tanto de lo que pensamos, sino de lo que sentimos. Este tránsito pone en evidencia patrones mentales que nos llevan a una crítica excesiva y a juicios que pueden limitar nuestra percepción.
Por otro lado, Neptuno nos invita a disolver el ego y a conectar con una dimensión trascendental, una experiencia que trasciende los límites personales y que, según la perspectiva de Ken Wilber, nos acerca a una consciencia de unidad y a una experiencia holística del organismo total.
El eclipse lunar en Virgo se presenta como un llamado a honrar la sensibilidad interior, invitando a examinar hábitos y patrones inconscientes, y a liberar emociones y creencias del pasado. La conjunción de energías, marcada por influencias como Venus y Mercurio retrógrados junto a la presencia de Marte en Cáncer, actúa como una metáfora de una limpieza interna, comparable a ordenar un santuario repleto de recuerdos, permitiendo que la transformación personal se manifieste.
En este escenario cósmico, la reflexión y el orden interno se vuelven esenciales. La influencia de dos planetas personales en retroceso enfatiza la necesidad de revisar lo expresado y lo no dicho, cerrando ciclos pasados y abriendo la puerta a un aprendizaje emocional que se profundizará en los próximos eclipses del eje Virgo-Piscis. Así, se marca una transición del análisis racional hacia una conexión más intuitiva y empática.
Finalmente, este eclipse marca el cierre de un ciclo que inició en septiembre de 2024 con la Luna Nueva en Virgo. Es el momento de soltar rigideces internas y de crear espacios flexibles que honren nuestra verdadera esencia. El Sol, desde Piscis, nos guía para que abramos la mente a otras dimensiones de la existencia, recordándonos que la vida es como una compleja y hermosa composición musical, en la que cada nota es parte de un todo.
En unas semanas, tendremos el eclipse solar en Aries, cuya energía dinámica y de iniciación nos habla de la necesidad de reconfigurar la percepción de la realidad y abrir nuevos senderos de autoconocimiento. Cada fase lunar y cada eclipse se convierten, así, en oportunidades para alinear nuestro ser con el cosmos, integrando aprendizajes pasados y proyectando un futuro de renovación.
Que este proceso te inspire a reconectar contigo misma y a encontrar en cada experiencia, por intensa que sea, la oportunidad de crecer y de transformarte.
Con mucho cariño,
Mónica Sagredo – Astrología Conectiva